Dificultad: Difícil
Tiempo: 6 horas
El clásico Roscón de Reyes es un dulce muy típico español, un clásico en las casas que se come el día de Reyes. Ya sea solo o relleno de nata, es una tradición ineludible. Todos los roscones traen en su exterior un haba y una sorpresa. Manda la tradición que el que encuentre el haba paga el roscón, y el que encuentre la sorpresa, se proclama rey de la fiesta.
Ingredientes para 8 personas:
- 550 gramos de harina de fuerza
- 25 gramos de levadura de panadería
- 150 ml de leche
- 2 huevos
- Ralladura de un limón
- Ralladura de una naranja
- 1 cucharadita de agua de azahar
- 100 gramos de mantequilla
- 150 gramos de azúcar
- 1 pizca de sal
- Nata montada
- Fruta escarchada para adornar, almendras y azúcar humedecido.
- Se templa la leche ligeramente y se disuelve en ella la levadura.
- Se coloca la harina con un hueco en el medio, en forma de volcán. En el interior del volcán se van vertiendo el resto de ingredientes: la leche con la levadura, los huevos, la ralladura de limón y naranja, la mantequilla, el azúcar y la sal.
- Se mezcla con una cuchara o una espátula de fuera hacia adentro con cuidado, poco a poco, hasta que la masa vaya adquiriendo consistencia. Hay que mezclar mucho hasta que la masa comience a despegarse de los bordes. Cuando sea más o menos consistente se amasa sobre la encimera espolvoreada con harina hasta que sea una bola uniforme. Si queda pringosa o poco consistente, hay que añadir un poco de harina hasta que se despegue de las manos.
- Esta masa se tapa con un paño y se deja reposar durante al menos 3 horas, para que fermente, hasta que doble su tamaño.
- Una vez que haya crecido, se vuelve a amasar para que eliminar el aire. Con los dedos se hunde la masa en el centro con mucho cuidado para hacer el agujero del medio. Se hace la forma del roscón, bastante delgado, ya que volverá a crecer. Se vuelve a tapar y se deja crecer durante al menos otra hora, para que vuelva a doblar el tamaño.
- Se pinta con un huevo batido para que se dore y se adorna con azúcar humedecido, frutas escarchadas, almendras laminadas... En mi casa no somos muy fans de la fruta escarchada, así que nos hemos conformado con el azúcar, pero admite todo tipo de adornos.
- Se introduce en el horno precalentado a 180ºC durante al menos 20 minutos. Se hace bastante rápido, así que hay que estar pendiente para que no se queme.
- Se saca del horno y se deja enfriar tapado con un paño para que no se seque. Cuando esté frío, se parte a la mitad longitudinalmente con un cuchillo y se rellena con nata montada, volviendo a colocar la tapadera. También se colocan en el interior el haba y la sorpresa. Se cubre con film transparente y se conserva en la nevera para que guarde toda su frescura.
Aunque parece una receta larga y tediosa, en realidad la única dificultad radica en un buen amasado de la masa, y en dejarla reposar el tiempo suficiente para que fermente. El proceso de fermentado se puede repetir hasta otra vez, lo que conseguirá un masa todavía más esponjosa, a coste de más tiempo.
0 comentarios:
Publicar un comentario